Este lugar se encuentra a un costado de la Parroquia de nuestra Señora de Belén y resguarda una colección de retablos del siglo XVII y XVIII, además de una serie de objetos sacros que valen mucho la pena pasar a conocer; por ejemplo el cuadro único en América Latina que representa la circuncisión del Niño Jesús; la exhibición de la vestimenta de los párrocos de los siglos pasados y la obra del bautismo de Jesús realizada por Osorio, la cual destaca porque cuenta con unas ilusiones ópticas que te impresionaran.