La ciudad de Perote se impone portentosa ante la sierra veracruzana, su altura la hace testigo del tiempo y de sus profundos valles.
Su clima cálido todo el año la vuelve un estupendo lugar de descanso, pero si quieres aventura, tienes que conocer la naturaleza en todo su esplendor que Perote, Veracruz, representa.
La ciudad de Perote data del año 1527 y se le atribuye ser la tercera cuidad fundada de América Latina. Poco a poco fue reconocida por sus amplios cerros y montañas en las cuales vive una exótica fauna endémica.
Sus preciosas edificaciones coloniales dan testimonio de la historia de la ciudad. Una muestra de ello, es la Fortaleza de San Carlos, que data del siglo XVIII y donde nació el primer Colegio Militar.
La ciudad fue durante mucho tiempo refugio de españoles en la guerra civil, de europeos en la segunda guerra mundial y un instituto carcelario hasta los años 70.
Pero Perote no solo es historia colonial, también posee en sus alrededores hermosos parajes donde puedes admirar la naturaleza de una manera especial.
Te darás cuenta de esto si subes al Cofre de Perote, la octava montaña más alta de México.
La gastronomía del lugar es sencilla pero deliciosa, puedes disfrutar de comida típica de la zona como son los embutidos artesanales (vestigio de la época colonial), los chilposos de camarón (guiso con masa de maíz), chilposos de pancita de res y la deliciosa panadería local con los cocoles de queso. Te deleitarás con sabores locales que te llevarán a viajar en el tiempo.
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