Es una parada imperdible, así como el resto del primer cuadro del pueblo, que ocupa seis manzanas. Se trata de un templo edificado en 1652, de arquitectura austera. La Parroquia de Santiago Apóstol construida por los franciscanos data del siglo XIX. Destaca su sorprendente fachada ornamentada por un artista nativo, excelente muestra del estilo barroco indígena o tetitqui que se caracteriza por la profusión de imágenes y decoración con motivos fitomorfos. Con una sucesión de imágenes extrañamente proporcionadas, con expresiones rayando en lo burlón, sosteniendo cuernos de la abundancia y un auténtico vergel de frutas y hojas verdes decorando capiteles y columnas, el efecto es realmente asombroso. La portada está presidida por la imagen de Santiago Apóstol a caballo.